Ya no podré disfrutar
De sus ojazos celestes
Y su sonrisa profunda
O su enojo por la vapuleada a veces inexplicable
De un jefe refunfuñador
Quizás me sorprenda
Como verlo
En el reflejo de su gemelo
Igual pero diferente
Y entonces
En mi corazón
Latirán de nuevo
Sus ojos celestes
Y su sonrisa profunda
Inexplicable a veces
Estos finales
Impensados
Joel partió…
Dejando tras de sí
Un montón de afectos
Que lloran y llorarán siempre su ausencia
Me parecerá verlo
Con su escafandra cortando el césped
O comiéndose un platazo de comida recalentada
En el sector de mantenimiento
Y será
Que nunca se habrá ido
Y será
Que nos dejo
Su fraternal presencia
Caminando cansino y doblado por su altura
Extrañaran sus pies
Ponerse de puntillas
Para darle el beso
De las buenas noches.
5/2/2013